Mover el router de posición. Lo primero y lo más fácil que se puede hacer es mover de lugar el router. Estos aparatos no suelen ser muy bonitos, por lo que muchos los esconden en el rincón más oculto del armario. Pero esto podría estar interfiriendo con la señal de internet. Intentar colocar el router en un lugar central al descubierto es una excelente opción. La posición ideal es montarlo en el techo de la casa de la sala familiar.
Cambiar el canal de radio o el ancho de banda. La mayoría de routers operan en la banda de 2.4GHz en el mismo canal de radiofrecuencia, que otros aparatos como el microondas, monitor de bebés u otros routers en el vecindario y la señal del WiFi podría estar demasiado saturada. Es mejor intentar cambiar el canal desde los ajustes del router.
Primero hay que conectarse a la red inalámbrica > Luego hay que ingresar la dirección IP del router en la casilla de URL en el navegador de internet > Ir a la opción de "Control de canales" (el nombre varía según el modelo) > Se selecciona un canal menos saturado como el 1, 6 o 11.
Si se tiene un router de doble banda, es mejor cambiar a la de 5GHz desde los mismos ajustes. Esta banda será más rápida y tiene más canales de frecuencia de radio de donde elegir.
Comprar un extenser de señal. Si la conexión sigue lenta, puede que la distancia que se quiere abarcar es demasiado amplia para el router y se tendrá que instalar otro punto de acceso en la casa. Si se cuenta con un modelo antiguo, se lo puede convertir en punto de acceso para la señal del router principal desde los ajustes. O se puede comprar un "WiFi range extender" que hace lo mismo.
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